Cabe aclarar que es la primera vez que veo a Gloria de los Ángeles Treviño Ruiz en vivo y eso que cuando era más pequeño me encantaba, pero nunca había tenido la oportunidad de ir a uno de sus conciertos y claro, asistí al recinto de Reforma y me dejó un, digamos, respetable sabor de boca.
Los primeros acordes de "Gloria" empezaron a sonar cuando salió la Trevi con un energía impresionante para cautivar al Auditorio Nacional aunque un fallo en el sonido hizo que la cantante parara a los músicos dos veces ofreciendo disculpas por los nervios y justificando que era culpa de la energía del público.
Inmediatamente después, llegó "Fuego con fuego", "Con los ojos cerrados", una de las rolas más coreadas de la noche; y una de mis canciones favoritas, "Lo que una chica por amor es capaz", donde se vistió como una colegiala.
Posteriormente llegó la mini "obra de teatro" mal lograda para contar una historia un poco tediosa y pretenciosa que lo único que lució ahí fue el amante cubano, y todo esto para dar pie a "Psicofonía"...¡ahhh! pero el asunto no para ahí, siguió lo bueno (textual) cuando el ángel de la guarda de la artista salió y todo el Auditorio cantó al unísono dicha canción mientras el angelito volaba y protegía a la cantante.
Una de las cosas que no me gustaron fue el comic que realizó para presentar "La Noche" creo que estuvo fuera de lugar y puedo decir que un poco aburrido.
Pero creo "Pelo suelto", "Zapatos viejos" y "La papa sin catsup" compensó lo anterior ya que burlándose de sus creaciones fílmicas, se aventó un gran speech mientras alzaba un Óscar (Gómez) en su mano, haciéndome reír para después cantar dichas canciones que nos hicieron recordar a quienes vimos sus largometrajes.
"Todos me miran" con una bandera gay en el escenario; "Pruébamelo" con un video tan sugestivo que incitaba a probárselo a tu acompañante; y "Cinco minutos" donde la guerra de sexos surgió (por enésima vez): no podían faltan en el show y es que la energía, actitud y entusiasmo hicieron que los miles de asistentes que abarrotaron el Coloso de Reforma vibraran al escucharlas.
Tengo que decir que las ocurrencias, historias, dichos y comentarios que hizo la atrevida me hicieron carcajear, sí, pero creo que en una ocasión se le pasó un poco la mano con algo que dijo y no es que yo sea moralino, obvio no, pero ella sabe perfectamente que había cientos de niños.
Todo lo que empieza, acaba y después de casi dos horas y media, la Trevi se despidió, no sin dejar sus éxitos en el cajón e interpretó "El recuento de los daños", "Dr. Psiquiatra" y para cerrar con broche de oro, "Mañana".
Decenas de cambios de vestuario, peinados, escenografía, juego de luces, varios bailarines y la energía brutal de la cantautora fueron elementos importantes para que no cayéramos en el infierno y gozáramos como si estuviéramos en la gloria, claro, con nuestro angelito de la guarda.