Confieso algo, no soy fan de hueso colorado de Mecano aunque me gustan muchísimas de sus canciones, respeto lo que Ana, José y Nacho hicieron juntos a lo largo de su carrera y lo sigo aplaudiendo porque sin duda fue un gran grupo que dejó huella por todo el talento que dejó a su paso pero lo que realizó Ana Torroja durante su concierto en el Auditorio Nacional fue impresionante, gran conexión con el público, excelente energía y lo que me dejó boquiabierto fue que hubo público de toooodas las edades que se sabían la mayoría de sus temas.
Había desde el señor trajeado bailando solo al ritmo de "Barco a Venus" hasta otro niño como de seis años entonando "Ay qué pesado"; hasta la pareja gay dedicándose las letras; y la adolescente pidiendo, casi desde el inicio del show, que saliera Leonel García, cantante que sí apareció pero fue de los últimos números que vimos de la velada, con una gran aceptación y gritos durante "Me cuesta tanto olvidarte".
Mi canción favorita del trío ochentero "La fuerza del destino" fue la designada para abrir el show, al igual que "Conexión" el DVD que realizó hace algunos meses, y apareció la cantante con un gran atuendo en medio del público y caminó hacia el escenario que estaba rodeado por unas plataformas de metal.
para seguir inmediatamente después con "Hoy no me puedo levantar" y "A contratiempo".
Antes de que siguiera con una gran melodía, sino es que la mejor de la noche, "Disculpa" expresó una palabras de agradecimiento "Es lo que me gusta de México, esa alegría, el calorcito y el apapacho que siente uno; no sabeis la emoción que siento, tanta que me cuesta hasta respirar por pisar este escenario otra vez. Este es un viaje por los sentidos, si tienen que gritar, griten; si se les sale la lagrimita, está bien; si quieren pegar de brincos, háganlo. ¡Disfruten a lo máximo!".
Minutos después, apareció una figura de una mujer delgada sobre el escenario y se empezaron a escuchar los acordes de "50 palabras, 60 palabras o 100" para recibir a Sasha, Benny y Erik, quienes regresaron a poner al público de pie con su talento, energía y sencillez, sobre todo de Sokol, ¿por qué lo digo?, porque ella le puso sutilmente el zapato a la española que se le había caído segundos antes. Gran gesto de generosidad.
A lo largo de un poco más de dos horas, el concierto estuvo lleno de recuerdos llenos de melodías de Mecano, de los primeros temas que ella realizó como solista además de las canciones nuevas como "Infiel" y "A tus pies" (tema creado por HaAsh y Pablo Preciado), contenidas en su más reciente producción discográfica.
Minutos después, el rey, Carlos Rivera apareció recibido con fuertes ovaciones por los centenares de seguidores para deleitar a más de uno con "El 7 de septiembre" y terminando su participación le emitió: "México ama tu voz, tu existencia y yo te amo a ti".
Aunque en temas como "Corazones" y "Duele el amor" me hicieron falta enormes artistas con quien ella ha hecho duetos como Miguel Bosé y Aleks Syntek, se entiende que no siempre se puede y aún así fueron números muy disfrutables.
Además, para la velada, la cantante española se hizo acompañar por Paty Cantú en la canción "Mujer contra mujer", con quien al final simularon un beso; y Ximena Sariñana con "Un año más", con la cual se despidió del escenario para dar paso al famosísimo y anhelado encore.
Reapareció interpretando "Hijo de la luna" y "Barco a Venus" para dar paso a una parte que pareciera que es no fue planeada pero lo fue, y fue una de las más importantes porque la cantautora complació a varios cantando pedazos de canciones que el público pedía como "Soy", "Dalí", "Sentía" y "No hay marcha en Nueva York", por mencionar algunas.
Reapareció interpretando "Hijo de la luna" y "Barco a Venus" para dar paso a una parte que pareciera que es no fue planeada pero lo fue, y fue una de las más importantes porque la cantautora complació a varios cantando pedazos de canciones que el público pedía como "Soy", "Dalí", "Sentía" y "No hay marcha en Nueva York", por mencionar algunas.