Ésta es una frase que escuché en el tráiler de la nueva serie de Netflix, "Atypical", y se me quedó muy grabada tanto para verla y después de más de 4 horas de maratón, recomendarla; pero antes de hacerlo, la pregunta que se me vino a la mente fue ¿qué es ser normal?, honestamente esa palabra la odio, no la entiendo, es un concepto muy viejo que tuve que buscarlo en la RAE: Que sirve de norma o regla / Que, por su naturaleza, forma o magnitud, se ajusta a ciertas normas fijadas de antemano.
Y después de darle tantas vueltas al concepto, que afortunadamente ya está en desuso, me di cuenta que la serie escrita por Robia Rashid es todo menos normal, la primera temporada de ocho episodios, no posee convencionalismos, su historia es tan simple y compleja a la vez, y eso se agradece, le doy gracias porque no observamos los típicos personajes en situaciones comunes, es una narrativa muy peculiar que tu corazón agradecerá y querrás ver más.
La serie explora la adolescencia de Sam (Keir Gilchrist) y su transición a la vida adulta que está delimitada por un trastorno autista pero que no le impide ser altamente funcional e independiente; por sí solo, asiste a un colegio público, posee un empleo y viaja en un autobús, aunque no le guste el roce de su espalda con el asiento.
Al protagonista le cuesta mucho trabajo conseguir amigos, está obsesionado con la Antártica, sobre todo con los pingüinos barbijos, y no puede hablar de otra cosa, su mundo gira en compartir datos de esta región; le cuesta experimentar cosas nuevas y, de vez en cuando, dice cosas en voz alta que puede incomodar, especialmente a su familia, como cuando comentó que lo que más anhelaba es "ver unas bubbies" o que acababa de ser masturbado en un iglú.
La serie de Netflix se adentra, profundamente, en el mundo mágico de la mente de alguien con autismo pero en la mayoría de los minutos se cuenta desde la cabeza de Sam y eso es un tesoro de experiencias, qué piensa, qué desea, qué anhela, qué le molesta, un universo de sentimientos sin filtros, sin importar en dónde o con quien esté.
A su mamá le sigue preocupando que no cruce la calle con los ojos cerrados, golpeé a un policía o que se asuste en una tienda, y es que especialmente para ella la transición ha sido muy difícil y eso hay que agradecerle a la actriz Jennifer Jason Leigh, quien realiza un gran papel y le imprime varios matices, lleno de defectos, pero también lleno de aprendizajes del que no sólo ella tiene que asimilar sino su familia, especialmente su hija.
Ésta, es interpretada por Brigette Lundy-Paine quien realiza un buen trabajo, la quieres abrazar, es una adolescente que "tiene que cuidar" a su hermano pero lo hace abriéndole los ojos, ayudándole a socializar, lo golpea pero eso sí, nadie más lo puede hacer. A simple vista se ve el amor que siente hacia Sam, a pesar de todo(s).
"Atypical" está llena de escenas interesantes y una que es una gloria es cuando él decide que quiere tener sexo, y busca la ayuda de su amigo Zahid para conseguir condones en una farmacia y la conversación que posee con el farmacéutico es realmente divertido, escuchar una pregunta fuera de común pero tan valida como "¿Puedo probarme los condones antes de usarlos?" o "¿Cómo se ponen?".
Cada capítulo es hermoso, no sólo se trata de un adolescente que no bromea, es muy sincero y posee una tortuga llamada Edison, sino que además, navega sus necesidades especiales y las relaciones que posee con la gente en su entorno y este descubrimiento se torna de otro color cuando quiere encontrar una novia, aunque sea "de práctica".
Sino han tenido el chance de verla, realmente vale la pena que lo hagan, la observen, disfruten, cada uno de los personajes especialmente el principal te hace mover fibras, reflexionar y lo más importante, la disfrutas tanto que al ver el último capítulo de esta temporada, quieras ver mucho más de esta excelente historia.
Y siempre se lo he agradecido pero hoy, lo escribo: agradezco a la vida, ser "atypical", ser todo lo que quieran menos "normal"...
Al protagonista le cuesta mucho trabajo conseguir amigos, está obsesionado con la Antártica, sobre todo con los pingüinos barbijos, y no puede hablar de otra cosa, su mundo gira en compartir datos de esta región; le cuesta experimentar cosas nuevas y, de vez en cuando, dice cosas en voz alta que puede incomodar, especialmente a su familia, como cuando comentó que lo que más anhelaba es "ver unas bubbies" o que acababa de ser masturbado en un iglú.
La serie de Netflix se adentra, profundamente, en el mundo mágico de la mente de alguien con autismo pero en la mayoría de los minutos se cuenta desde la cabeza de Sam y eso es un tesoro de experiencias, qué piensa, qué desea, qué anhela, qué le molesta, un universo de sentimientos sin filtros, sin importar en dónde o con quien esté.
A su mamá le sigue preocupando que no cruce la calle con los ojos cerrados, golpeé a un policía o que se asuste en una tienda, y es que especialmente para ella la transición ha sido muy difícil y eso hay que agradecerle a la actriz Jennifer Jason Leigh, quien realiza un gran papel y le imprime varios matices, lleno de defectos, pero también lleno de aprendizajes del que no sólo ella tiene que asimilar sino su familia, especialmente su hija.
Ésta, es interpretada por Brigette Lundy-Paine quien realiza un buen trabajo, la quieres abrazar, es una adolescente que "tiene que cuidar" a su hermano pero lo hace abriéndole los ojos, ayudándole a socializar, lo golpea pero eso sí, nadie más lo puede hacer. A simple vista se ve el amor que siente hacia Sam, a pesar de todo(s).
"Atypical" está llena de escenas interesantes y una que es una gloria es cuando él decide que quiere tener sexo, y busca la ayuda de su amigo Zahid para conseguir condones en una farmacia y la conversación que posee con el farmacéutico es realmente divertido, escuchar una pregunta fuera de común pero tan valida como "¿Puedo probarme los condones antes de usarlos?" o "¿Cómo se ponen?".
Cada capítulo es hermoso, no sólo se trata de un adolescente que no bromea, es muy sincero y posee una tortuga llamada Edison, sino que además, navega sus necesidades especiales y las relaciones que posee con la gente en su entorno y este descubrimiento se torna de otro color cuando quiere encontrar una novia, aunque sea "de práctica".
Sino han tenido el chance de verla, realmente vale la pena que lo hagan, la observen, disfruten, cada uno de los personajes especialmente el principal te hace mover fibras, reflexionar y lo más importante, la disfrutas tanto que al ver el último capítulo de esta temporada, quieras ver mucho más de esta excelente historia.
Y siempre se lo he agradecido pero hoy, lo escribo: agradezco a la vida, ser "atypical", ser todo lo que quieran menos "normal"...
"Los pingüinos forman pareja de por vida por eso no son como las personas"