Para quien me conoce sabe perfecto que Luis Miguel me cae mal, desde que tengo uso de razón nunca me ha gustado, aunque tengo que aceptar que sí, tiene una gran voz, no la mejor de nuestro país pero sí de las más sobresalientes además de una sensibilidad para expresar lo que las letras de las canciones irradian, posee grandes temas y algunas están en mi setlist, no lo negaré, pero los desplantes que ha hecho a lo largo de los años, es lo que no me late del intérprete de "Será que no me amas".
Y sus seguidoras lo saben, y ahí están, y eso no lo entiendo, por más groserías y desprecios que les ha llegado a hacer, ahí están como incondicionales y eso, perdón, no es lo que hace un verdadero fan, bajo mi visión. Estoy de acuerdo que te encante fisicamente, te enloquezcan sus temas, como se mueve y demás pero los caprichitos que ha llegado a hacer eso sí no me lo explico.
Se siente de otro universo y eso, la culpa no es de él, sino quienes se ponen como tapete, compran sus discos, van a sus conciertos, entienden sus cientos de cancelaciones, soportan horas de espera para que ni las salude, ¿le sigo?
Y esto lo comento porque ahora resulta que, a raíz de "Luis Miguel: La Serie", todos quieren santificar al cantante y echar a la hoguera a Luisito Rey, si estuviera vivo ya lo hubieran linchado. Y ojo, yo no defiendo a ninguno, el detalle es que me impresiona cómo se han apasionado tanto con este tema que a todas horas y todos los días mientras duró la serie de Netflix (13 semanas) se hablaba de él como si fuera el más reciente acontecimiento que cambió el rumbo de la historia.
Y en efecto, la emisión sí lo fue pero hay un detalle que a varios se les ha olvidado, es una serie dramatizada, una cosa es lo que estuvo dispuesto a compartir el llamado "Sol", otra lo que los escritores captaron para plasmarlo y otra muy aparte lo que ellos quieren ambientar para que la historia tenga matices, suspenso, lágrimas, sangre, dinamismo y que se hable (bien o mal) de ella.
Y sus seguidoras lo saben, y ahí están, y eso no lo entiendo, por más groserías y desprecios que les ha llegado a hacer, ahí están como incondicionales y eso, perdón, no es lo que hace un verdadero fan, bajo mi visión. Estoy de acuerdo que te encante fisicamente, te enloquezcan sus temas, como se mueve y demás pero los caprichitos que ha llegado a hacer eso sí no me lo explico.
Se siente de otro universo y eso, la culpa no es de él, sino quienes se ponen como tapete, compran sus discos, van a sus conciertos, entienden sus cientos de cancelaciones, soportan horas de espera para que ni las salude, ¿le sigo?
Y esto lo comento porque ahora resulta que, a raíz de "Luis Miguel: La Serie", todos quieren santificar al cantante y echar a la hoguera a Luisito Rey, si estuviera vivo ya lo hubieran linchado. Y ojo, yo no defiendo a ninguno, el detalle es que me impresiona cómo se han apasionado tanto con este tema que a todas horas y todos los días mientras duró la serie de Netflix (13 semanas) se hablaba de él como si fuera el más reciente acontecimiento que cambió el rumbo de la historia.
Y en efecto, la emisión sí lo fue pero hay un detalle que a varios se les ha olvidado, es una serie dramatizada, una cosa es lo que estuvo dispuesto a compartir el llamado "Sol", otra lo que los escritores captaron para plasmarlo y otra muy aparte lo que ellos quieren ambientar para que la historia tenga matices, suspenso, lágrimas, sangre, dinamismo y que se hable (bien o mal) de ella.
Así que de lo que es la historia original a lo llevado a la pantalla podría haber un abismo de incertidumbre, mentiras, nombres ocultos, datos no revelados e intereses personales, porque en efecto, el cantante no tiene un pelo de tonto
Él sabía perfectamente, al igual que los productores, lo que iban a generar y sucedió tanto así que todos los días tenemos información del vecino del amigo de la ex de Luis Miguel; el mecánico del primer carro de la novia del cantante; o la amiga de la tía italiana que conocía a su mamá. Así de ridículo es y así de importante es el tema.
Y lo confieso, el morbo me ganó y vi la serie completa pero también lo hice porque para poder hablar del tema hay que observar y revisar lo que hay en pantalla y tengo que decir que más allá si el cantante me gusta o no, o si el relato es 100% fiel; la historia, ambientación y musicalización está bien hecha, crearon un entorno exacto para que cada uno de los tres actores que interpretaron a Luis Miguel mostrara lo que le sucediò de la mejor manera.
Tengo que mencionar que en los primeros capítulos, Diego Boneta no me convencía con el papel, había límites para que le creyera lo que mostraba, su actuación la sentía plana pero conforme conforme fueron avanzando las semanas te das cuenta que hubo un trabajo detrás y que evolucionó para mostrarnos lo que disfrutó/sufrió el cantante de "1+1=2 enamorados".
Fuera de eso, todo está cuidado con pinzas, fueron muy meticulosos con el cast, desde el actor que encarnó al papá de Luis, Óscar Jaenada, hasta sus novias, aunque claro, al igual que muchos personas, el que que quedaba fuera de estas palabras era quien interpretaba al hermano del Sol, Juanpa Zurita, pésimo actor y más gris que la pared de en frente.