´La fama me vale madres´


Ésta frase, quizá, y sólo quizá, pudiera englobar el tema de la obra "Quiero Volverme Supernova" la cual realiza una crítica interesante acerca de la fama y sus grandes aristas pero no sólo desmembrana cómo los integrantes de este reparto llegaron a tenerla, sino la forma de asimilarla, adueñarse de ella, que se desvaneciera entre sus manos y con esto, enfrentar sus fatídicas consecuencias. 

Porque podría parecer que la popularidad es miel sobre hojuelas, pero no es cierto, cada quien la asimila diferente, en esta puesta escrita por Joserra Zuñiga desmitifica lo que muchos podrían admirar de alguien famoso, de algún personaje que aparece en horario estelar o el galán que acapara todos los canales de televisión, cuando no existía internet. 

La historia nos remonta a un refugio que alberga a ex estrellas infantiles, quienes pasan el tiempo hablando de sus días de gloria; todos ellos fueron muy admirados pero ya esa época ha quedado en el pasado, lo de hoy es un cantante pop que llega para descansar, pero no le será fácil ya que se topará con un mago de la televisión, un "par de gemelas", una actriz de novelas, y un productor con gusto por el travestismo.

Mariana Gajá, Pablo Perroni, Adriana Montes de Oca, Salvador Petrola, Angélica Bauter y Joshua Okamoto son quienes le dan vida a estos seres que poseen pinceladas y fueron inspirados, sin duda alguna, por ciertos personajes del medio del espectáculo nacional, no diré nombres porque se perdería, de alguna manera, ese misterio. 

Al ritmo de "Here comes the sun" (Los Beatles), nos trasladan a través de flashbacks a aquellas escenas en su vida en las cuales las alegrías eran su "pan diario" pero también existieron lágrimas, aquellas que los hicieron enfrentarse ante ellos mismos y caer, gracias a la ley de gravedad. 

Cada una de las actuaciones no se pierden, cada interpretación posee sus grandes momentos, las palabras emitidas son como bombas que caen debajo de tu asiento para que te muevas y abras los ojos de lo que ellos vivieron y lo que están pasando; todos están increíbles, pero creo, que quien luce mucho más en casi toda la historia, es Gajá, la manera tan respetuosa de laborar su personaje se nota, sus movimientos, su mirada, sus lágrimas, su calidez. Es única encarnando a "Huerfanita de mi corazón".

Voy a confesar algo, pensé, minutos antes de entrar al Teatro Milán, que me iba a reír mucho más, que mi "panza" me iba a doler de tanta risa emitida pero no fue así, claro, por supuesto, te diviertes desde que entras al Foro Lucerna, por lo que los personajes están realizando y te vas dando cuenta de lo ahí podría ocurrir. 

Y con esto no estoy diciendo que no me la pasé genial, sucedió, gracias a la minuciosa dirección que nos permite observar a través de un tapiz floreado y muebles de la abuelita, una sociedad tan banal, tan desechable, que no observa más allá de lo que se presenta(ba) en sus pantallas, de esa "comunicación" que existía cuando pensaban que todo los que poseía el famoso era perfecto. 

Sólo una cuestión, en la escenografía, cuando alguien da un portazo se mueve todo y hasta piensas que se va a caer estos colores excéntricos; afortunadamente no fue así, y todo siguió en orden pero algún momento pensé, ¿a poco no se han dado cuenta de este pequeño -y para muchos, insignificante- detalle?


"Un fan siempre será un fan"

QUIERO VOLVERME SUPERNOVA
Foro Lucerna
Miercoles y jueves 20:30 h.
Dirección: Alonso Íñiguez
Dramaturgía: Joserra Zuñiga

Reparto: Pablo Perroni,Mariana Gajá, Adriana Montes de Oca, Salvador Petrola, Angélica Bauter y Joshua Okamoto.