2 Chicas Quebradas

No me acuerdo con exactitud cuando vi el primer capítulo de "2 Broke Girls" (2 Chicas Quebradas), pero desde que observé esos minutos detenidamente quería ver más y más, me interesaba mucho saber cómo se iba desarrollando esta historia que emociona, que te sorprende, pero, sobre todo, te entretiene de una manera muy particular.

Lo digo porque el humor que maneja no es para todos, es demasiado negro, se meten con temas como la religión, la política, la pobreza, preferencias sexuales, diferencias étnicas, por mencionar algunas, es muy ácido, tanto que lo gozas y siento que esa es una de sus mayores cualidades, saber reírse de lo que estamos pasando como sociedad (bueno, cuando fue filmada, en 2011), y también de ellos mismos, de sus personajes.

Para quien no conozca esta "sencilla" historia aborda el encuentro, la relación laboral y (ene)amistad de dos meseras de Brooklyn, New York: Max Black (Kat Dennings) de familia con pocos recursos económicos y Caroline Channing (Beth Behrs) de familia rica, pero, ahora sin dinero por un problema legal que tuvo su padre.

Ambas son completamente opuestas, son el agua y el aceite, como el cielo y el infierno, la forma de encontrarse e ir reforzando lazos es muy simpática, su relación es más hiel que miel, pero, es funcional, no es una relación de amistad como la vemos en otras series donde todo "parece perfecto", o que el problema se arregla en "1,2, por 3", aquí hay muchos roces, gritos, hasta golpes, pero al final ellas saben, que a pesar de sus diferencias, siempre contaban con la otra.

Un aspecto que amo, y que me emocionaba cada vez que la veía era la forma en que esta amistad va creciendo, se va conjugando para poder hacer un negocio juntas y para eso, obviamente, necesitaban dinero y al final de cada episodio se marca la cantidad económica que acumulaban para esperar con ansia cuánto iban a  juntar el próximo capítulo.

Al igual que ellas, cada uno de los personajes que las acompañan en esta travesía de 6 temporadas, son una joya, la química que poseen traspasa la pantalla, a quienes vemos ahí son seres humanos que se equivocan, tropiezan una y otra vez, poseen defectos, vamos descubriendo sus fortalezas y observamos cómo se relacionan, de una manera tan orgánica, tan cruda, tan real.

Haciendo memoria no tengo un capítulo favorito, y es que todos  tienen esa sal y azúcar que ayudan para que disfrutes más de los momentos, podría decir que el primer capítulo porque me conquistó casi de inmediato e hizo que no parara de verlas a lo largo de varios años.

Tengo que admitir que no toda la serie fue perfecta, siento que la última temporada estuvo de más, muy forzada, sin tanto argumento, por ahí había unas chispas interesantes, pero, en general, cayó en su historia, en sus situaciones cómicas y ni que decir del final, no me emocionó como pensé que lo haría.

Y qué mal, a esta serie le sucedió que tuvo muy buenos comentarios, iba creciendo poco a poco, pero la ambición y no querer terminar una historia en un punto interesante, que la alargaron de tal manera que la "paja" y la historia que se podría nutrir de los personajes se fue diluyendo, desafortunadamente.

Aún así, no puedo negar las horas que me reí gracias a toda la serie, los minutos de alegría que me daban cuando me olvidaba de lo que estaba viviendo y momentos de reflexión, sobre todo, en lo que respecta a la amistad.


"Si Dios cierra una puerta, trabajas aquí"