Confieso que ya había comprado mi respectivo ticket para una de las funciones de su temporada en el Teatro El Milagro, pero la vida me regaló la oportunidad de ver uno de los ensayos de "El Autor", y no perdí la oportunidad de hacerlo porque había algo dentro de mí que me gritaba que si no lo hacía esa noche, quizá no lo haría en la fecha estipulada, gracias al conocido fuckin´ virus.
Y así fue, llegué a la hora acordada, vi a algunos de los actores dispersados en el lobby del recinto céntrico, y minutos antes de pasar al teatro, el director Benjamín Cann, nos recalcó que era un ejercicio y que no nos extrañemos si llegaban a leer o sacaban el libreto.
Dadas la circunstancias, elegí un lugar al azar, había decenas de asientos para hacerlo y esto es un punto importante porque de alguna manera te involucra más o menos a la historia que estás a punto de descubrir.
Sobre el escenario de cuatro frentes había una silla, iluminada, y en un extremo estaba sentado Alberto Estrella frente a una mesa con algunos libretos, plumas, concentrándose y mirando quién iba llegando al espacio.
Y no quiero revelar muchas cosas acerca de esta experiencia porque en definitiva perdería cierta magia si lo hago, sólo tengo que decir que Tim Crouch, el autor de la historia, cuenta a lo largo de más de una hora, los efectos que una obra tuvo sobre los dos actores que la interpretaron, el autor que la escribió y un miembro de la audiencia que la vio.
Y tal vez esta propuesta escénica parece más complicado de lo que es pero cuando la mires, y empieces a darte cuenta de la dinámica, te quedará más claro y sí, es una historia de abuso, de violencia pero al mismo tiempo de mucho poder.
Este poderío que le imprimen, además, Carmen Madrid, Emilio Guerrero y Miguel Santa Rita quienes independientemente que fuera un ensayo me movieron emocionalmente, de alguna manera me sentí identificado y salí del recinto satisfecho por la dinámica que hay entre ellos, aunque ni siquiera se toquen.
Y sí, aunque hay una conversación entre ellos, no están frente a frente, no existe un enfrentamiento a centímetros, y eso favorece para que sientas aún más sus palabras y gritos de furia.
Y tal vez esta propuesta escénica parece más complicado de lo que es pero cuando la mires, y empieces a darte cuenta de la dinámica, te quedará más claro y sí, es una historia de abuso, de violencia pero al mismo tiempo de mucho poder.
Este poderío que le imprimen, además, Carmen Madrid, Emilio Guerrero y Miguel Santa Rita quienes independientemente que fuera un ensayo me movieron emocionalmente, de alguna manera me sentí identificado y salí del recinto satisfecho por la dinámica que hay entre ellos, aunque ni siquiera se toquen.
Y sí, aunque hay una conversación entre ellos, no están frente a frente, no existe un enfrentamiento a centímetros, y eso favorece para que sientas aún más sus palabras y gritos de furia.
EL AUTOR
Teatro El Milagro
DRAMATURGIA: Tim Crouch
DIRECCIÓN: Benjamín Cann
REPARTO: Carmen Madrid, Emilio Guerrero, Alberto Estrella y Miguel Santa Rita